Tratamiento para la recuperación de la fractura de Peroné en deportistas - FisioClinics Pozuelo

Las fracturas son lesiones traumáticas comunes en la población actual, sobre todo en aquellas personas que practican deporte con regularidad, una de las que se presenta con mayor frecuencia es la fractura de peroné, misma para la que en nuestra clínica de fisioterapia en Pozuelo contamos con diversidad de tratamientos para recuperar las funciones alteradas, en nuestro servicio Rend&Prev en el cual contamos con profesionales especialistas en la preparación del sistema músculo-esquelético con la finalidad de prevenir lesiones y tratar aquellas que ya se encuentren presentes.

¿En qué consiste una fractura de peroné?  

Antes de explicar de que se trata esta lesión es importante mencionar y dar a conocer algunas generalidades de este hueso del miembro inferior, el peroné, conocido como fíbula, es un hueso largo y estrecho ubicado entre la rodilla y el tobillo, el cual se conecta con la tibia y el astrágalo para formar distintas articulaciones, en su parte superior podemos encontrar una región llamada cabeza del peroné mientras que su parte inferior se denomina maleolo externo.

Además de ser un importante componente articular, el peroné también es una zona de inserción muscular 

El peroné es un hueso superficial que está ubicado en la parte externa de la pierna, al lado de otro importante hueso llamado tibia, brindando, junto con este, estabilidad y a su vez movilidad a la zona del tobillo.

La fractura distal del peroné, también conocida como fractura del maleolo o tobillo externo, es una lesión en la que se presenta una fisura o una perdida de continuidad del hueso, es frecuente en deportistas, especialmente en aquellos que practican deportes de contacto; sin embargo, también puede afectar a cualquier grupo de personas.

¿Cuáles son las causas de una fractura de peroné en deportistas?

Una fractura de peroné ocurre cuando se somete al tobillo a una tensión mecánica excesiva que el hueso es incapaz de soportar, un simple esguince o torcedura de tobillo puede llevar a una fractura de peroné, ya que la zona distal de este, se encuentra unida a los huesos del pie mediante fuertes ligamentos que al lesionarse traccionan de manera fuerte sus inserciones óseas al punto de romper el hueso. 

Las fracturas del peroné en deportistas, se presentan con frecuencia debido a las cargas repetitivas que estos deben soportar sobre los tobillos

Este tipo de lesión es común que se presente durante la realización de actividades deportivas como el futbol, el baloncesto o el tenis, sin embargo, aunque es menos común, también puede darse por situaciones traumáticas como caídas o accidentes automovilísticos. 

¿Cuáles son los signos y síntomas de una fractura de peroné?

Los signos y síntomas presentes ante una rotura ósea del peroné, dependerán del tipo de rotura y las estructuras afectadas, por la longitud del peroné es común que el hueso se lesione en diferentes sitios, la clasificación de esta lesión según las zonas de afección es la siguiente: 

• Rotura de la cabeza del peroné: Este tipo se presenta en el extremo superior del hueso cercano a la zona de la rodilla 
• Rotura de la diáfisis del peroné: tiene lugar en la zona central del hueso, suelen ser las de tipo menos graves
• Fractura del maleolo lateral: Esta es la lesión más frecuente y complicada debido a que se presenta a la altura del tobillo 
• Fracturas por estrés:Aunque es poco frecuente, se presenta por la realización de esfuerzos repetitivos y constantes 

Las fracturas del peroné que se presentan con mayor frecuencia son a la altura del maleolo externo

Los síntomas que presenta el paciente ante una rotura ósea del peroné a nivel del maleolo externo inician con un chasquido o crujido en la zona lateral de la articulación del tobillo, después de esto suele aparecer un dolor intenso acompañado de otros signos como:

• Hinchazón e inflamación de la zona
• Enrojecimiento o hematomas en el área afectada 
• Incapacidad o dificultad para apoyar el pie 
• Dolor a la palpación
• Sensación de inestabilidad en la articulación
• Deformidad de la articulación 
• Alteraciones de la sensibilidad en la zona

Por su parte, una fractura del peroné a nivel del maleolo externo, por ser el tipo más común, suele clasificarse de la siguiente forma:

• Tipo A: ocurren cuando el hueso se ve afectado por debajo de la mortaja o articulación, usualmente son estables y no representan una lesión grave
• Tipo B: se presentan en la articulación comprometiendo estructuras como el ligamento deltoideo y la sindesmosis, un tipo de articulación que une a la tibia con el peroné, generando una gran inestabilidad articular
• Tipo C: Este tipo de fractura se produce por encima de la articulación, afectando la sindesmosis y los ligamentos, ocasionando una severa inestabilidad articular, y requiriendo de una cirugía para su reparación

¿Cómo se detecta una fractura de peroné?

Una rotura ósea del peroné es una lesión que ocurre en el contexto de otras lesiones como esguince, luxación o subluxación de la articulación del tobillo, por eso es importante que a la hora de emitir un diagnóstico se descarte la presencia de otras afecciones, la manera más fiable de hacerlo es a través de la realización de estudios de imagenología como una radiografía o una resonancia magnética, además de esto el médico realizará una anamnesis o interrogatorio para conocer el mecanismo mediante el cual se produjo la fractura, y a través de un examen físico que incluye la palpación, valorará la articulación para conocer que estructuras se encuentran afectadas.

Emitir un diagnóstico certero resulta de gran importancia, ya que existen casos en los que al producirse un esguince de tobillo no se toma en cuenta la posibilidad de fractura, haciendo que puedan utilizarse métodos de tratamientos que no son los idóneos en este tipo de lesión.

¿Cuál es el tratamiento de la fractura de peroné?

Existen dos opciones de tratamiento para las fracturas del peroné, estas serán el abordaje de tipo conservador o la cirugía, la elección del mismo dependerá de la gravedad de la lesión y será determinado por el médico especialista en traumatología.

Por su parte, el tratamiento de tipo conservador consistirá principalmente en tomar medidas que permitan estabilizar el segmento afectado en función de permitir que se produzca el proceso de consolidación ósea de manera correcta, esto mediante la implementación de una férula o yeso correctivo que se mantendrá durante seis a ocho semanas y se retirara realizando previamente estudios radiológicos para determinar si se ha completado el proceso de curación, además de esto en las primeras horas o días posteriores a la fractura el médico indicará algunos medicamentos de tipo antiinflamatorio y analgésicos para disminuir el dolor y la inflamación, el abordaje conservador incluye además el tratamiento por parte de la fisioterapia tanto durante el periodo de inmovilización como después de este, sobre todo en aquellas personas que practican algún tipo de deporte con la finalidad de mantener y recuperar la funcionalidad del miembro inferior afectado 

El tratamiento conservador será efectivo en la medida que la rotura ósea no esté desplazada y la sindesmosis no se encuentre afectada 

Si la rotura ósea es grave y se presentan signos como desgarro de la piel, dolor intenso, fragmentos óseos desplazados, alteración de las sindesmosis y existe un sangrado importante, entonces el procedimiento a realizar será la cirugía, en esta, el cirujano intenta alinear los fragmentos óseos con la ayuda de materiales de osteosíntesis, al final de la operación se inmoviliza la articulación y el médico indica un control radiológico aproximadamente durante un año para retirar posteriormente el material utilizado, igualmente se indica el inicio de un tratamiento en fisioterapia. 

¿Cómo actúa la fisioterapia en la recuperación de una rotura ósea del peroné?

El tratamiento que brinda la fisioterapia en la recuperación de este tipo de lesiones es de suma importancia, teniendo en cuenta que quienes la padecen son deportistas, quienes de manera frecuente quieren regresar al campo deportivo en el menor tiempo posible, el abordaje fisioterapéutico variara de acuerdo a las características individuales de cada paciente, el gesto deportivo que practique y el tratamiento médico seleccionado, además de esto el fisioterapeuta realizará una valoración exhaustiva previa al tratamiento para determinar las técnicas y métodos más adecuados. 

Durante la fase de inmovilización los objetivos de la fisioterapia serán mantener el rango articular y la fuerza muscular de otros segmentos adyacentes, ya sea que el abordaje haya sido de tipo conservador o quirúrgico, algunas de las medidas implementar serán:

• Aplicación de agentes físicos como crioterapia y electro analgesia
• Movilizaciones pasivas asistidas de segmentos como la rodilla y la cadera 
• Drenaje linfático 
• Ultrasonido y magnetoterapia(solo en el abordaje conservador)
• Ejercicios isométricos para producir contracciones musculares sin realizar movimientos
• Educación sobre el uso de aditamentos para la marcha como lo son las muletas 

Una vez retirada la inmovilización, el objetivo será el fortalecimiento muscular, así como la recuperación de la movilidad y la readaptación deportiva, para esto se utilizarán medidas de tratamiento como:

• Electroestimulación muscular 
• Ejercicios de estiramiento y fortalecimiento
• Reeducación de la marcha sin ayudas ortopédicas
• Ejercicios de coordinación y equilibrio
• Ejercicios funcionales adaptados al gesto deportivo
• Ejercicios de carga y descarga 

Para finalizar, desde FisioClinics Pozuelo queremos recordarte que cumplir con el tratamiento fisioterapéutico será fundamental para volver a la actividad deportiva de manera rápida y oportuna, así mismo se podrá evitar la aparición de otras posibles afecciones que podrían derivar de una curación incorrecta; así pues, que si necesitas cumplir con tu proceso de recuperación no dudes en contactarnos.